Pasos para Apreciar un buen Vino

Observación visual:

    • Sostén la copa de vino por el tallo para evitar calentar el líquido con el calor de tu mano.
    • Examina el color del vino. Observa su intensidad y tonalidad. Los vinos tintos suelen variar desde tonos púrpuras hasta granates, mientras que los blancos pueden ser desde amarillos pálidos hasta dorados.

                                      

  1. Olfato:
    • Gira suavemente la copa para permitir que el vino entre en contacto con el oxígeno. Esto ayuda a liberar los aromas.
    • Acerca tu nariz a la copa y huele el vino. Intenta identificar los diferentes aromas, como frutas, flores, especias o madera.
    • Los aromas primarios provienen de las uvas, los secundarios son resultado del proceso de fermentación, y los terciarios se desarrollan durante el envejecimiento en barricas.

                                

  1. Degustación:
    • Toma un sorbo pequeño y hazlo circular en tu boca, permitiendo que el vino toque todas las partes de tu lengua.
    • Considera la textura del vino. ¿Es ligero, medio o completo en cuerpo?
    • Presta atención a los sabores. Los vinos pueden tener notas frutales, especiadas, florales, minerales, entre otras.
    • Analiza la acidez, el equilibrio y la persistencia del sabor. ¿El vino tiene un final largo y agradable?

                                               

  1. Temperatura del vino:
    • Sirve el vino a la temperatura recomendada. Los vinos tintos suelen disfrutarse ligeramente más cálidos que los blancos.
    • La temperatura influye en la expresión de los aromas y sabores del vino, así que asegúrate de seguir las recomendaciones de temperatura para cada tipo.
  2. Maridaje con alimentos:
    • Experimenta combinando el vino con diferentes alimentos. Algunos vinos realzan los sabores de ciertos platos.
    • La regla general es maridar vinos tintos con carnes rojas y vinos blancos con pescados y aves, pero hay muchas excepciones y preferencias personales.
  3. Tomarse el tiempo necesario:
    • Disfruta del vino a tu propio ritmo. Tómate el tiempo necesario para apreciar cada aspecto, desde la apertura hasta el último sorbo.
    • No tengas miedo de explorar diferentes variedades y estilos de vino para desarrollar tu propio gusto y preferencias.

Apreciar un buen vino es subjetivo, y cada persona puede tener preferencias diferentes. La clave es disfrutar del proceso y aprender más sobre tus propios gustos a medida que exploras el mundo del vino.